viernes, 30 de diciembre de 2016

Besarrabia y Rumania


Besarabia (en rumanoBasarabia; en ucraniano Бессарабія; en ruso: Бессарабия, Bessarabiya; en turcoBesarabya) es una región del sureste de Europa Oriental. Limita al norte y este con Ucrania y al sur y oeste con Rumania.
Besarabia era el nombre con el que el Imperio ruso identificó la parte oriental del principado de Moldavia, que Rusia arrebató en 1812 al Imperio otomano y la organizó como la Gobernación de Besarabia. Lo que quedaba de Moldavia se unió a Valaquia en 1859, creando el Reino de Rumania.
En 1917 fue proclamada la República Democrática de Moldavia como parte de la RSFSR (República Socialista Federativa Soviética de Rusia). A principios de 1918 se integró a la República Soviética de Odesa. Desde febrero de 1918 esta última luchó contra las tropas rumanas en Besarabia y desde marzo contra las austríaco-alemanas. El 13 de marzo de 1918 fue ocupada y aniquilada por ellas. Después de eso Sfatul Tarii votó la unión con Rumania. La unión obtuvo reconocimiento internacional en 1920 por el Pacto de París, lo que provocó protestas de minorías étnicas y campesinos locales.
El 23 de agosto de 1939, nueve días antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial, la Unión Soviética pactó con la Alemania nazi la reincorporación de la Besarabia a soberanía rusa (véase Pacto Ribbentrop-Mólotov). En junio de 1940, el 9.º Ejército soviético ocupó la región, pero los soviéticos la perdieron de nuevo durante la invasión de la Unión Soviética a mediados de 1941. Como resultado de la Segunda Guerra Mundial, la Unión Soviética conservó Besarabia, reorganizándola como la República Socialista Soviética de Moldavia, asignando sus porciones meridionales y septentrionales a la República Socialista Soviética de Ucrania.
Hoy día la mayor parte de Besarabia pertenece a la Moldavia, mientras que dos pequeñas partes, los extremos meridional y noroccidental, pertenecen a Ucrania.
El nombre Besarabia (en rumanoBasarabia) proviene de la familia valaca Basarab, quien gobernó la parte meridional de la región. El nombre se aplicó originariamente en la zona meridional, que corresponde al actual Budjak. Los turcos fueron los primeros en llamar la zona Besarabya, cuando lograron el control de la zona en 1484.
Del siglo XV al siglo XIX, la región fue parcialmente dominada por Moldavia, el Imperio otomano (sólo Budjak), RusiaRumania, la URSSUcrania y nuevamente Moldavia.
Del siglo III al siglo XI la región fue invadida a menudo por godos, hunos,  ávaros,  eslavos,  búlgaros,  magiares, pechenegoscumanos y mongoles.
El territorio de Besarabia formó parte de reinos efímeros que eran desechos cuando llegaban nuevas oleadas de inmigrantes. Estos siglos se caracterizaron por un fuerte estado de inseguridad y movimientos de masas.
En el año 561, los ávaros ocuparon Besarabia y ejecutaron al dirigente local Mesamer. Entonces, el 582, los búlgaros onogures, que habían sido desplazados hacia la Moesia inferior por los jázaros, se asentaron en el sur de Besarabia y norte de Dobrudja y ocuparon la futura Bulgaria. En el siglo VI los eslavos también se establecieron en la región.
Con la creación del imperio de los jázaros al este, las invasiones disminuyeron y se crearon estados más estables. Entre los siglos IX y XIII, Besarabia formó parte de los voivodato Bolohoveni (norte) y Brodnici (sur), los primeros principados valacos de la época. Las últimas invasiones a gran escala fueron las de los mongoles y tártaros de 1241, 1290 y 1343. Sehr al-Jedid, un pequeño grupo de la Horda de Oro, se asentó cerca del actual Orhei hasta que fueron expulsados en 1390. Llevaron a retiro a gran parte de la población a zonas montañosas en los Cárpatos Orientales y Transilvania. Especialmente baja era la población al este del río Prut durante las invasiones tártaras.

Principado de Moldavia
Tras la derrota de los mongoles en 1343, la región fue incluida en el principado de Moldavia, que estableció en 1392 su control sobre las fortalezas de Cetatea Albă y Chilia, al margen septentrional del Dniéster.
A finales del siglo XIV, la parte meridional de la región formaría parte del reino de Valaquia, gobernada entonces por la dinastía Basarab, originaria del país. En el siglo XV toda la región formarba parte del principado de Moldavia. Ștefan cel Mare (Esteban el Grande) gobernó entre 1457 y 1504, un largo período de 50 años en que ganó 32 batallas defendiendo el país contra los otomanos y contra los tártaros, y sólo perdió dos. Durante este periodo, después de cada victoria construía un monasterio o iglesia cerca del campo de batalla para honrar el cristianismo. Muchas de estas iglesias, así como antiguas fortalezas, están en Besarabia.

La mayor parte de Besarabia fue durante siglos parte del principado de Moldavia. En la imagen, un mapa de 1800 que muestra Moldavia en color naranja oscuro.

El 1484 los turcos invadieron y capturaron Chilia y Cetatea Albă (Akkerman en turco), y se anexó la parte costera meridional de Besarabia, que fue dividieda en dos sanjaks (distritos) del Imperio otomano. El 1538 los otomanos se añadieron más territorio del sur de Besarabia hasta Tighina, mientras que la parte central y septentrional formaba parte del principado de Moldavia, vasallo de los otomanos.
Entre 1711 y 1812, el Imperio ruso ocupó la región cinco veces durante las guerras que mantuvieron contra el Imperio otomano y el Imperio austríaco. Entre 1820 y 1846, los búlgaros y gagauzos emigraron hacia el Imperio ruso a través del Danubio, después de vivir años de opresión bajo el yugo otomano, y se asentaron en el sur de Besarabia. Algunas tribus turcófonas de la Horda de Nogái también habitaban la región de Budjak, al sur de Besarabia de los siglos XVI al XVIII, pero fueron totalmente expulsados en 1812.
Anexión del Imperio ruso
Con el Tratado de Bucarest del 28 de mayo de 1812, por el que terminó la Guerra Ruso Turca de 1806-1812, el Imperio otomano cedió la parte oriental del principado de Moldavia al Imperio ruso. Esta región fue entonces llamada Besarabia. Antes de ese año, el nombre sólo fue usado para la parte meridional, que estuvo bajo dominio directo de los otomanos desde el 1484.
El 1814 se establecieron los primeros colonos alemanes al sur del territorio, y los búlgaros de Besarabia también se asentaron, fundando ciudades como Bolhrad. Administrativamente, Besarabia se convirtió en un oblast del Imperio ruso de manera efectiva desde el 1818 y un guberniya desde el 1873. Por el Tratado de Adrianópolis que finalizó la Guerra Ruso-Turca de 1828-1829 todo el delta del Danubio fue añadido al óblast de Besarabia.

Mapa de 1883 de la gobernación de Besarabia y sus regiones en el Imperio ruso.
A finales de la Guerra de Crimea, en 1856, por el Tratado de París, dos distritos del sur de Besarabia fueron devueltos a Moldavia y el Imperio ruso perdió el acceso al Danubio. Hacia 1859, Moldavia y Valaquia se unieron en un solo estado, que tomó el nombre de Reino de Rumania en 1866, incluida la parte meridional de Besarabia.
La Guerra de Independencia Rumana estalló en 1877 y contaron con el Imperio ruso como aliado. Aunque la alianza entre Rumania y el Imperio ruso especificaba que Rusia respetaría la integridad territorial de Rumania y no reclamaría ninguna parte el fin de la guerra, por el Tratado de Berlín de 1878, la parte meridional de Besarabia fue nuevamente anexada por Rusia.
Incitado por las autoridades, el 6 de abril de 1903 explotó el pogromo de Kishinev. Fue la primera acción de antisemitismo dirigida por las autoridades en el siglo XX; murieron entre 47 y 49 judíos, 92 fueron heridos gravemente y 700 casas fueron destruidas.
Tras la Revolución rusa se desarrolló en Besarabia un movimiento nacionalista rumano. En el caos provocado por la Revolución de octubre de 1917, se constituyó un Consejo Nacional (Sfatul Țării), con 120 miembros elegidos por Besarabia y 10 elegidos por Transnistria —situada en el margen izquierdo del río Dniéster, habitado por moldavos y rumanos—.
El 14 de enero de 1918, durante los desórdenes provocados por la retirada del frente rumano de dos divisiones rusas, Chisináu fue saqueada. El Comité Rumcherod (Comité Ejecutivo Central del Soviet de Trabajadores, Soldados y Marineros Diputados del Frente Rumano, Flota del Mar Negro y la región de Odesa) se proclamó autoridad suprema en Besarabia. El Sfatul Țării no fue capaz de reclutar ninguna unidad armada, por lo que reclamó el apoyo del gobierno rumano. El 16 de enero una división rumana ocupó Chisináu, y al día siguiente Tighina en los márgenes del río Dnister. Al tercer día, los soviéticos fueron expulsados de Besarabia.
Diez días después, el 24 de enero de 1918, el Sfatul Țării declaró la independencia de Besarabia como República Democrática Moldava.
El 9 de abril de 1918, el Sfatul Țării votó a favor de la unificación con Rumanía por 86 votos a favor, tres en contra y 36 abstenciones. La unión fue confirmada por los Aliados de Rumanía por el Tratado de París (1920).

Unificación con Rumania
El 27 de marzojul./ 9 de abril de 1918greg., el Sfatul Ţării decidió por 86 votos a favor, 3 en contra y 36 abstenciones, la unión con el Reino de Rumania, condicionada a la aplicación de la reforma agraria, el respeto a la autonomía local, y a los derechos humanos.
Las juntas provinciales de BălţiOrhei y Soroca habían sido las primeras en solicitar la unión con el reino de Rumania, y esta se aprobó efectivamente la fecha indicada, con las siguientes condiciones:
1.   El Sfatul Ţării llevaría a cabo una reforma agraria, que sería aceptada por el Gobierno rumano.
2.   Besarabia seguiría siendo autónoma, con su propia dieta, el Sfatul Ţării, elegida democráticamente.
3.   El parlamento aprobaría los presupuestos locales, y tendría el control de los consejos de zemstvos y ciudades, y el nombramiento de los miembros de la administración local.
4.   El servicio militar obligatorio se llevaría a cabo sobre una base territorial, de manera que los reclutas besarabos servirían en Besarabia.
5.   Las leyes locales y la forma de administración podrían cambiar sólo con la aprobación de los representantes locales.
6.   Los derechos de las minorías debían ser respetados.
7.   Besarabia enviaría al Parlamento rumano un número de representantes igual a la proporción de su población en el total rumano.
8.   Todas las elecciones debían realizarse mediante sufragio directo, igualitario, secreto y universal.
9.   La libertad de expresión y de creencias debían estar garantizadas en la Constitución.
10. Todos los individuos que habían cometido delitos por razones políticas durante la revolución serían amnistiados.
Los gobiernos de la Entente, tratando de no perder su influencia en Rumania a manos de los Imperios Centrales, aceptaron la unión, aunque, manteniendo diversos puntos de vista, decidieron no expresar opinión alguna oficialmente. Los Imperios, que había firmado la paz con los representantes ucranianos el 9 de febrero, ocuparon los territorios fronterizos con Besarabia, alejando el peligro soviético y facilitando la anexión rumana del territorio.

Parte de Rumania


Por su parte, el 5 de mayo de 1919 se fundó un Gobierno Provisional de Trabajadores y Campesinos de Besarabia en el exilio de Odesa por los bolcheviques.
El 11 de mayo de 1919, se proclamó la República Socialista Soviética de Besarabia autónoma de la República Socialista Federada Soviética de Rusia, pero fue abolida por fuerzas militares de Polonia y Francia en septiembre de 1919 (ver Guerra Soviética-Polaca). Tras la victoria de los bolcheviques en la Guerra Civil Rusa, en 1922 fue creada la República Socialista Soviética de Ucrania y, en 1924, una franja de tierra ucraniana del margen izquierdo del Dniéster fue declarada República Autónoma Socialista Soviética de Moldavia.
La unión con Rumania fue reconocida oficialmente por Francia, el Reino Unido y otros países europeos tras la Conferencia de Paz de París de 1919. La Rusia Soviética no aceptó dicha unión.

Segunda Guerra Mundial

El 23 de agosto de 1939 se firmó el Pacto Mólotov-Ribbentrop y en su artículo 4 del Protocolo Adicional secreto, Besarabia quedaba dentro de la zona de influencia soviética.
El 26 de junio de 1940, en aplicación del Pacto, la URSS envió un ultimátum al gobierno de Rumania para evacuar en cuatro días Besarabia y el norte de Bucovina. Las dos provincias tenían un área de 51.000 km² y 3.750.000 habitantes, mayoritariamente rumanos. Dos días más tarde, la administración rumana se retiró de los territorios y durante la retirada (entre el 28 de junio y el 3 de julio) se dedicaron a atacar a los comunistas locales, mayoritariamente judíos y ucranianos.11 El ejército rumano fue atacado por el Ejército Rojo, que entró en Besarabia cuando la administración rumana se retiró. El ejército rumano sufrió la muerte o desaparición de 356 oficiales y 42.876 soldados.12 Una vez las tropas soviéticas entraron en Besarabia, esta fue incorporada a la URSS, repartida entre la República Socialista Soviética de Moldavia y la República Socialista Soviética de Ucrania. Así mismo, muchos habitantes fueron ejecutados o deportados a Siberia y Kazajistán



Besarabia entre 1920 y 1940.


Fuente: Wikipedia

Búlgaros, Bulgaria

Introducción histórica y geográfica

Búlgaros

"Búlgaros", palabra que proviene del latín “Bulgari”, que literalmente puede significar "los hombres del Bolg"; Bolg es el antiguo nombre del río Volga, cuyas riberas habitaron los búlgaros hasta el siglo VI.
Las culturas prehistóricas asentadas en las tierras búlgaras incluyen la cultura neolítica de Hamangia y la cultura de Vinca (5-3 milenio a. C.), la cultura de Varna en el eneolítico (5° milenio a. C.) y la cultura de Ezero de la Edad del Bronce. La cronología Karanovo sirve como un indicador de la prehistoria en la región de los Balcanes.
Los tracios, uno de los tres principales grupos ancestrales de los búlgaros modernos, vivieron separados en varias tribus hasta el 500 a. C., cuando el rey Teres I unificó a la mayoría de ellos en el Reino odrisio. Eventualmente, fueron conquistados por Alejandro Magno y más tarde por los romanos. Después de emigrar de su patria original, algunos grupos de eslavos meridionales se asentaron en el territorio de la actual Bulgaria durante el siglo VI y se mezclaron con los tracios "romanizados". Finalmente, la élite de los búlgaros incorporó a todos ellos en el Primer Imperio Búlgaro.

Búlgaria

Asparukh, heredero de Kubrat, kan de la Antigua Gran Bulgaria, emigró con varias tribus de búlgaros a las tierras bajas de los ríos Danubio, Dniéster y Dnieper (conocido como Ongal), poco después de que el estado de su padre fuese subyugado por los jázaros. Conquistó las provincias bizantinas de Mesia y Escitia Menor (Dobruja), ampliando su reino hasta el interior de la península balcánica.  Un tratado de paz con Bizancio en 681 y el establecimiento de la capital búlgara de Pliska, al sur del Danubio, marcaron el comienzo del Primer Imperio Búlgaro.
Los sucesores de Asparukh fortalecieron al estado búlgaro: Tervel (700/701–718/721) fijó las fronteras y estableció Bulgaria como una gran potencia militar tras derrotar a un ejército árabe de 26.000 hombres en 717, eliminando así la amenaza de una invasión a gran escala por parte de los árabes hacia Europa Central y Oriental.
Krum (802–814), duplicó el territorio del país, asesinó al emperador Nicéforo I en la batalla de Pliska e introdujo el primer código civil escrito, válido para los eslavos y búlgaros. En 864, Boris I (852–889) abolió el tengrianismo, reemplazándolo por el cristianismo ortodoxo oriental, además de que introdujo el alfabeto cirílico, desarrollado en las escuelas literarias de Preslav y Ohrid. El alfabeto cirílico, junto con el antiguo idioma búlgaro, conformaron el principal idioma escrito en Europa del este (lingua franca), idioma que ahora es conocido como antiguo eslavo eclesiástico. Durante el reinado del emperador Simeón I el Grande (893–927) Bulgaria alcanzó su máxima expansión territorial en su historia. Simeón logró ganar una supremacía militar sobre el Imperio bizantino, demostrada en la batalla de Aqueloo, una de las batallas más sangrientas en la Edad Media, así como una de sus victorias más decisivas. Su reinado también vio el desarrollo de una cultura eslava cristiana muy rica y única, que se convirtió en un ejemplo para otros pueblos eslavos de Europa del Este y también fomentó la existencia continua de la nación búlgara, a pesar de fuerzas que le amenazaban.
A mediados del siglo X, poco después de la muerte de Simeón, el poderío de Bulgaria declinó, debilitados por las guerras con los croatas, magiares, pechenegos y serbios y la propagación de la religión de los bogomilos. Esto dio lugar a invasiones consecutivas por parte del Rus de Kiev y Bizancio, que terminaron con la toma de la capital, Preslav, por el ejército bizantino. En el mandato de Samuel, Bulgaria se recuperó un poco de estos ataques y logró vencer a Serbia, Bosnia  y Doclea; pero esta racha de victorias terminó en 1014, cuando el emperador bizantino Basilio II («El Bulgaróctono») derrotó a sus ejércitos en Klyuch.  Samuel murió poco después de la batalla, el 15 de octubre de 1014 y en 1018 el Imperio bizantino conquistó totalmente al Primer Imperio Búlgaro, llevándolo a su fin.

Segundo Imperio Búlgaro

Basilio II logró prevenir las rebeliones al mantener las leyes locales de la nobleza de Bulgaria, que se incorporaron en la  aristocracia bizantina como arcontes o estrategos, garantizando así la indivisibilidad de Bulgaria con sus antiguos límites geográficos y reconociendo la autocefalía del Arzobispado búlgaro de Ohrid.  Después de su muerte, las políticas internas bizantinas cambiaron, lo que condujo a una serie de rebeliones sin éxito, la más grande de ellas fue dirigida por Pedro Delyan. Sin embargo, no fue hasta 1185 cuando los nobles de la dinastía Asen, Iván Asen I y Pedro IV, organizaron un gran levantamiento que logró restablecer al Estado búlgaro, marcando el inicio del Segundo Imperio Búlgaro.


La dinastía Asen estableció su capital en Veliko Tarnovo.  Kaloyan, el tercero de los monarcas de Asen, extendió sus dominios a Niš, Belgrado y Skopie, reconoció la supremacía espiritual del Papa y recibió una corona real de un legado apostólico. El crecimiento cultural y económico se mantuvo con Iván Asen II (1218–1241), quien extendió su control sobre Albania, Epiro, Macedonia y Tracia. En esa época, los logros de la escuela artística de Tarnovo, así como las primeras monedas acuñadas por un gobernante búlgaro fueron algunos de los indicadores del bienestar del Imperio.
La dinastía Asen terminó en 1257, y debido a las invasiones de los tártaros (iniciadas a finales del siglo XIII), conflictos internos y constantes ataques de los bizantinos y húngaros, el poderío militar y económico del país disminuyó. A finales del siglo XIV, las divisiones entre los terratenientes feudales búlgaros (boyardos) y la propagación de los bogomilos habían causado la división del Segundo Imperio Búlgaro en tres pequeños zaratos (Vidin, Tarnovo y Karvuna) y varios principados semiindependientes que luchaban entre sí y también contra los bizantinos, húngaros, serbios, venecianos y genoveses. En el período entre 1365 y 1370, los turcos otomanos, que ya habían iniciado su invasión de los Balcanes, conquistaron la mayoría de las ciudades y fortalezas búlgaras al sur de los montes Balcanes y comenzaron su avance hacia el norte.

Caída del Segundo Imperio y mandato otomano

En 1393, los otomanos tomaron Tarnovo, la capital del Segundo Imperio Búlgaro, después de un asedio de tres meses. En 1396, el Zarato de Vidin cayó tras la derrota de una cruzada de cristianos en la batalla de Nicópolis. Con esto, los otomanos finalmente subyugaron y ocuparon Bulgaria. Durante su reinado, la población búlgara sufrió enormemente por la opresión, la intolerancia y el mal gobierno. La nobleza fue eliminada y el campesinado explotado por los otomanos, mientras que los búlgaros carecían de igualdad judicial con los otomanos musulmanes y pagaban impuestos más altos que ellos. La cultura búlgara se aisló de Europa, sus logros fueron destruidos y el clero educado huyó a otros países
A lo largo de los casi cinco siglos de dominación otomana, el pueblo búlgaro respondió a la opresión mediante el fortalecimiento de la tradición del haiduk ("bandolerismo"), y trató de restablecer su estado organizando varias revueltas, destacando los dos levantamientos de Tarnovo (en 1598 y 1686) y la rebelión de Karposh (1689). El despertar nacional de Bulgaria fue uno de los factores clave en la lucha por la liberación, resultando en la sublevación de abril de 1876, la rebelión búlgara más grande y mejor organizada de todas. Aunque fue derrotada por las autoridades otomanas (en represalia, los turcos masacraron a unos 15.000 búlgaros), el levantamiento llamó a las grandes potencias a actuar. En 1876, convocaron a la Conferencia de Constantinopla, pero sus decisiones fueron rechazadas por las autoridades otomanas, lo que permitió al Imperio ruso buscar una solución por la fuerza sin correr el riesgo de una confrontación militar con otras grandes potencias (tal y como había sucedido en la Guerra de Crimea, de 1854 a 1856).

Fuente: Wikipedia